Consejos para utilizar las lentillas en la playa o en la piscina
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Cuando llega el verano, es habitual que surja la misma duda: ¿podemos utilizar nuestras lentillas o nuestras gafas para ir a la playa o a la piscina? La subida del mercurio obliga a que busquemos soluciones para poder vestir con los mínimos accesorios posibles. Sin embargo, cuando se trata de cuidar de nuestra visión, ¿cuáles son las acciones que podemos tomar?
En Óptica Tu Vista, como expertos en salud visual en Tenerife, son muchos los clientes que acuden a nuestro centro para informarse sobre la posibilidad de utilizar lentillas en la playa o en la piscina. Debemos conocer que, efectivamente, es posible poder acudir a la playa o a la piscina con nuestras lentillas o nuestras gafas. Sin embargo, son varios los consejos que debes seguir para evitar cualquier inconveniente.
Cómo utilizar las lentillas en la playa o en la piscina
Utiliza lentillas desechables
Cuando vayamos a darnos un baño en nuestra piscina o en la playa, siempre es recomendable que utilicemos lentillas de uso diario frente a las lentillas de uso mensual. Es importante tomar conciencia de este consejo, puesto que en el caso de que nos decantemos por opciones mensuales deberemos llevar a cabo una limpieza exhaustiva sobre ellas que puede llegar a dañarlas en el caso de no hacerlo con la suficiente precaución. En Óptica Tu Vista podrás comprar lentillas online y recibirlas en tu casa de una forma tan cómoda como sencilla.
Además, mediante el uso de lentillas desechables podremos reducir el riesgo de contaminación de cualquier tipo de bacteria sobre nuestros ojos.
Utiliza gafas de natación
Seguro que, tanto en el mar como en la piscina, tenemos la tentación de sumergirnos para disfrutar de un baño más que refrescante. Sin embargo, en el momento de realizar la inmersión, con independencia del tiempo que le dediquemos, es recomendable utilizar gafas de natación. De este momento, podremos asegurarnos de aislar a nuestros ojos del contacto del agua con nuestros consejos.
La importancia de una buena higiene
En el mismo momento en el que hemos salido de la piscina o del agua del mar, debemos lavarnos las manos para poder interactuar con nuestras lentillas. Además, éstas deben ser limpiadas con líquido de lentillas. El líquido debe ser el mismo con el que las desinfectamos a diario. De este modo, podremos evitar que entre cualquier posible germen que se encuentre en nuestras manos.
Es conveniente conocer que es posible que nuestro globo ocular pueda presentar alguna pequeña herida de diminuto tamaño a consecuencia del continuo roce de nuestras lentillas con el globo ocular. Evitar cualquier posible partícula que se encuentre en nuestras manos es fundamental para minimizar cualquier riesgo de sufrir una posible patología ocular.
Evita frotarte los ojos
En el caso de que lleves lentillas de uso diario y comiences a notar un cierto escozor, evita a toda coste frotarte los ojos. En caso de hacerlo, podríamos llegar a infectar nuestras propias lentillas y, en consecuencia, nuestros ojos. Ante de llevar a cabo cualquier contacto con nuestras manos, éstas deben estar completamente libres de partículas y de microbios.
En el caso de que no tengamos acceso a ningún espacio para llevar a cabo el proceso de lavado, siempre debemos llevar con nosotros toallitas de manos que nos permitan cubrir con nuestras necesidades en cualquier momento, hasta que tengamos acceso a un baño.
